Deficiencia de boro en la alfalfa
El boro ha mostrado que puede ayudar en el incremento del rendimiento y la mejora de calidad en varios cultivos. La alfalfa, es un cultivo que responde especialmente bien a la fertilización con boro, tal como se muestra posteriormente.
El boro es un nutriente esencial para todas las plantas. Los nutrientes actúan juntos para producir macollas de alfalfa vigorosas y sanas, con el potencial de maximizar el rendimiento y resistir el estres del cultivo. Aportar a la alfalfa cantidades adecuadas de boro es necesario para lo siguiente:
- Obtener plantas más verdes y más frondosas con alto contenido de proteína
- Lograr un rebrote más rápido después de cada corte
- Prolongar la vida de las macollas
- Mejorar la resistencia al frío
- Mejorar el crecimiento de las raíces
- Mejorar la eficacia en el uso del agua y la tolerancia a la sequía
- Lograr un mayor desarrollo de la nudosidad de la raíz para la fijación del nitrógeno
- Obtener macollas más densas para suprimir el crecimiento de pasto y malezas
La deficiencia de boro en el alfalfa, en su forma más leve, fácilmente puede no reconocerse, ya que parece una reducción en la floración y el desarrollo de las semillas. Una deficiencia tan leve rara vez se puede detectar en los rendimientos de heno con un solo corte. Sin embargo, la menor floración puede retardar el corte y el resultado es un heno de menor calidad. Finalmente, es probable que se reduzca la cantidad total de heno.
Los síntomas principales de la deficiencia de boro son el amarillamiento y enrojecimiento de las hojas superiores. A medida que se desarrolla la deficiencia, los entrenudos del crecimiento superior se vuelven gradualmente más cortos y las ramas laterales cortas ayudan a darle a la planta un aspecto de “roseta”. En esta etapa, el punto de crecimiento se vuelve inactivo o muere.
La deficiencia de boro se asocia estrechamente al estrés por falta de humedad y a la sequía. El amarillamiento del alfalfa ocasionado por la deficiencia de boro, con frecuencia, se confunde con los daños provocados por sequía. A menudo, se reduce la floración y las flores se caen antes de desarrollar semillas. Los síntomas de deficiencia de boro deben compararse con los daños provocados por los saltahojas, la deficiencia de potasio y ciertas enfermedades, que provocan el amarillamiento de las hojas inferiores y superiores. Cuando hay deficiencia de boro, el amarillamiento se limita a las hojas superiores y no se produce al azar, como ocurre con los daños provocados por los saltahojas.